LORD BYRON Y SUS MASCOTAS


Hoy os voy a contar algunas anécdotas de un escritor realmente curioso. Se trata de George Gordon Byron, uno de los escritores más importantes y conocidos del Romanticismo. Si hay algo que define e individualiza a Lord Byron es su carácter. Se ganó la reputación de ser original, controvertido y nada convencional. Se puede decir que Lord Byron amaba la belleza, y el estilo, la galantería y los modales que  mostraba eran siempre exquisitos. Byron siempre se ponía a favor de los débiles y marginados, y siempre consideró que la gente de la nobleza y la alta sociedad eran personas hipócritas. Además, amaba a los animales y le encantaba estar en compañía de sus mascotas. Su vida está plagada de curiosidades y anécdotas. Aquí os dejo algunas de ellas:

- Entre el repertorio de mascotas que tuvo Lord Byron se encontraban un zorro, monos, loros, gatos, un águila, un halcón, gallinas de Guinea, un cuervo, un tejón, gansos, una grulla egipcia, una garza y... un oso (el cual metió en una residencia en la que se prohibían los animales domésticos). Sin embargo, su preferido fue su perro terranova "Boatswain", al cual amaba realmente. De hecho, cuando murió su perro, lo enterró y escribió en su tumba estos versos tan maravillosos:

"Aquí reposan
los restos de una criatura
que fue bella sin vanidad
fuerte sin insolencia,
valiente sin ferocidad
y tuvo todas las virtudes del hombre
y ninguno de sus defectos."

O una frase que a mí me encanta y que también demuestra su amor por su mascota:

"Cuanto más conozco a los hombres, más quiero a mi perro"

- Lord Byron nació con una deformidad en el pie derecho. Era patihendido, es decir, sus dedos estaban metidos hacia dentro, lo cual le dificultaba muchas tareas. Su padre le dijo claramente que nunca llegaría a andar bien ni mucho menos a correr. Sin embargo, Lord Byron nunca se rindió y llegó a disimular su cojera, llegando incluso a correr. Cuando se hizo mayor, sus maneras y modales se combinaron con su cojera disimulada y le dieron una forma de andar única, muy propia y elegante.
Nunca sintió vergüenza por esta enfermedad, sino más bien todo lo contrario. Cuando la gente se reía de él y se burlaba de su pie, Lord Byron se enorgullecía de ello y respondía con clase:
"Cuando un miembro se debilita siempre hay otro que lo compensa".
- Lord Byron tuvo de pequeño una relación muy curiosa de amor-odio con su madre. Su madre Catherin le llamaba cojo bribón o pequeño diablo, mientras él la llamaba vieja o la viuda. Sin embargo, a pesar de estos pequeños roces, Lord Byron reconoció posteriormente que amaba a su madre y que ella era la única que lo entendía.