Vamos a explicar de dónde
viene la expresión española “Cantar las
cuarenta”. Se trata de un dicho que se utiliza cuando alguien reprende a
otra persona por algo que esta última ha hecho en relación con un asunto o
polémica, de tal forma que le echa una reprimenda con acusaciones suficientes
como para el regañado no pueda defenderse, pues quien canta las cuarenta lo
hace de manera vehemente, argumentando lo que piensa, y lo hace con tanta razón que el regañado no tendrá
excusa para defenderse ante las acusaciones recibidas.
La expresión proviene del
tute, un juego tradicional de naipes
español, a pesar de que el origen del juego es italiano, en el que gana quien
más puntos acumula. En este juego a cada carta se le da un valor, y al final
del juego se cuentan los puntos que cada jugador ha podido reunir. Al principio
del juego, se saca una carta cuyo palo de entre los 4 posibles de la baraja
española (oros, copas, espadas y bastos) hace de triunfo, es decir, las cartas
de ese palo son las que tienen más valor. Durante la partida, quien consigue
reunir el caballo y el rey del palo de triunfo, consigue 40 puntos los cuales
se “cantan”, esto es, se dicen en voz alta para que el resto de jugadores lo
sepa. Así, durante el juego la expresión “te voy a cantar las cuarenta” se usa
también para amenazarse unos jugadores a los otros con la posibilidad de lograr
la máxima jugada, llegando a extenderse en nuestros tiempos al lenguaje
cotidiano, tal y como se puede apreciar, como una amenaza de reprimenda, o una reprimenda
en sentido literal.